¿Son necesarios los filtros para luz azul?
Las personas nos estamos exponiendo en las pantallas más que en cualquier otra época, y este hecho ha generado preocupación de que esto pueda ser perjudicial por la vista.
En este contexto, cada vez se están haciendo más populares las gafas que pretenden filtrar la luz azul de los ordenadores, teléfonos y tablets. Los anuncios de estos productos dicen que la sobreexposición a luz azul puede causar varios problemas; unos supuestos problemas que van desde ojos secos hasta tensión ocular o ruptura del ciclo de son e incluso la degeneración macular. Sin embargo, no hay evidencias científicas de que el tipo o la cantidad de luz que provienen de las pantallas de ordenador perjudiquen a los ojos.
El sol, el principal emisor de luz azul.
Aunque solemos asociar este tipo de luz a los ordenadores y teléfonos, la fuente de luz azul principal es el sol. Otras fuentes podrían ser la luz fluorescente y la luz LED.
La exposición a la luz azul de las pantallas es mucho menor que la que recibimos del sol y no es más perjudicial que la luz del sol.
La exposición a la luz ultravioleta del sol aumenta el riesgo de sufrir enfermedades oculares como las cataratas, enfermedades de córnea o los tumores.
Por lo que respecta a la luz azul, tenemos menos información. Aún se están investigando sus efectos.
Sin embargo, cierto grado de exposición a la luz del sol parece ser necesario, ya que algunos estudios sugieren que una exposición insuficiente a esta luz podría afectar al crecimiento y desarrollo visual de los niños, además de aumentar el riesgo de miopía en adolescentes y jóvenes adultos.
¿Es necesario tomar medidas ante la luz azul?
Las largas horas que miramos las pantallas digitales pueden provocar tensiones oculares y la disminución del parpadeo asociado al ordenador puede causar ojos secos.
Estos efectos son causados por la forma en que la gente utiliza las pantallas, no por la luz que sale de las pantallas.
Tomar medidas preventivas frente a la luz azul sin que haya evidencias de que sea perjudicial, podría resultar más peligroso que la luz azul por sí misma. Es prematuro tomar acciones, ya que podría haber consecuencias indeseadas.
Para proteger los ojos de la tensión y de los ordenadores, provocada por cómo los utilizamos no por lo que sale de la pantalla, puedes seguir alguno de estos consejos:
- Visualiza las pantallas a una distancia de al menos la longitud del brazo.
- Coloque la pantalla de forma que mire un poco hacia abajo.
- Haga pausas regulares utilizando la regla: “20-20-20”, cada 20 minutos cambie los ojos para mirar un objeto a una distancia mínima de unos 6 metros.
- Cuando los ojos se sientan secos utilice lágrimas artificiales para refrescarlos
Los oftalmólogos recomiendan que todo el mundo se realice un examen ocular completo y regular para diagnosticar cualquier posible enfermedad ocular en las primeras etapas.
foto de Patricia Prudente de Unplash
